Si bien hay factores de riesgo que no podemos cambiar, como antecedentes genéticos de cáncer de mama, existen varias acciones en nuestro estilo de vida que podemos poner en marcha para reducir las probabilidades de desarrollar esta enfermedad. ¡Toma nota!
- Amamanta a tus hijos
La lactancia es una de las recomendaciones más mencionadas por los expertos para prevenir el cáncer de mama, ya que se piensa que los senos pasan por varios cambios cuando se amamanta, los cuales los protegen de agentes químicos causantes de cáncer.
- Bájale al alcohol
Las investigaciones han demostrado que un alto consumo de bebidas alcohólicas incrementa el riesgo de cáncer de mama, probablemente porque aumentan los niveles de estrógenos, aunque aún no se determina cuántas copas o qué cantidades son las más peligrosas.
- ¡Cuida tu peso!
La obesidad está vinculada a varias enfermedades y el cáncer de mama es una de ellas. Principalmente, las mujeres que después de los 18 años aumentaron más de 20 kilos tienen alrededor de un 40% más probabilidades de padecer dicha enfermedad.
- Haz ejercicio
La actividad física es fundamental para mantener una buena salud y reforzar nuestro sistema inmune. Además, se ha observado que entre menos ejercicio hagamos, hay más niveles de estrógenos en el cuerpo.
- No dejes tus exámenes médicos para después
Autoexplorarte frente al espejo, acudir a que te hagan la mastografía e indicar a tu médico que tienes antecedentes familiares con cáncer de mama, son medidas preventivas que no debes dejar pasar. Muchas mujeres no van al doctor por temor a su diagnóstico, pero entre más temprano se detecte alguna bolita o tumor, hay más posibilidades de que los tratamientos funcionen.
Tu salud es muy importante y hacer pequeños cambios como estos puede resultar en grandes beneficios y una mejor calidad de vida.
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