Las algas de mar son una de las comidas más maravillosas de la naturaleza. Están entre las plantas más densas en nutrientes del planeta y entre las fuentes más abundantes de minerales en el reino vegetal, ya que tienen acceso a todos los nutrientes del océano.
Siendo un súperalimento, con un poco brinda mucho.
Beneficios de las algas
- Purifican la sangre: la composición química de las algas está tan cercana a la del plasma sanguíneo que resultan excelentes para regular y purificar nuestra sangre.
- Son ricas en calcio: pueden contener hasta 10 veces más calcio que la leche y 8 veces más que la carne de vaca.
- Son alcalinizantes: ayudan a alcalinizar la sangre, neutralizando los efectos sobre-acídicos de la dieta moderna.
- Aportan poderosas propiedades quelantes: ofrecen protección contra una gran cantidad de toxinas ambientales, incluyendo metales pesados, contaminantes y subproductos de la radiación, convirtiéndolos en sales inocuas que el cuerpo puede eliminar fácilmente.
- Contienen antioxidantes: las algas poseen lignanos (compuestos químicos naturales) con propiedades anti-cancerígenas.
- Son desintoxicantes: resultan ricas en clorofila (el pigmento que vuelve verdes a algunas algas) la cual es un poderoso desintoxicante natural que ayuda a drenar elementos de desecho.
- Acelera la pérdida de peso: las algas aceleran el proceso de adelgazamiento y detienen la acumulación de celulitis. Su alta concentración natural de iodina ayuda a estimular la glándula tiroides, responsable de mantener un metabolismo sano. Al mismo tiempo, sus minerales actúan como electrolitos para romper los enlaces químicos que sellan las células adiposas, permitiendo que escapen los residuos atrapados.
Algas que puedes disfrutar todos los días
- Nori: es mejor conocida como el alga utilizada para preparar rollitos de sushi. Puedes hacerlos en casa, pero asegúrate de utilizar hojas de nori sin tostar para el máximo contenido de nutrientes.
- Kelp: también llamada alga marrón, es el alga más común que se encuentra a lo largo de las orillas del mar. Gracias a sus hojas gruesas resulta perfecta para un baño caliente de algas. También está disponible bajo la forma de suplemento.
- Dulse: es un alga roja y puede comprarse tanto entera como en escamas. El alga que se vende como escamas no necesita remojarse y puede ser añadida directamente a cualquier plato. El alga entera resulta mejor si la remojas, la cuelas y la cortas en juliana antes de agregarla a tu comida. Es genial usarla como condimento en ensaladas, vegetales y sopas.
- Arame: es un alga negra de apariencia fibrosa. Necesita remojarse por unos cuantos minutos antes de ser puesta a cocinar, cuando doblará su tamaño. Puede ser agregada a cualquier plato con granos, salteados, sopas, ensaladas y currys.
- Wakame: un alga de color verde oscuro, que se vende fresca o deshidratada. Sabe mejor cuando se hidrata en agua por unos minutos antes de utilizarse. Espolvoréala en sopas, guisos, salteados o platos bien sabrosos.
- Kombu: se utiliza en Japón desde hace siglos como un resaltador mineral de sabor. Añade una tira de kombu cuando cocinas garbanzoas para hacerlos más digeribles y reducir el gas. Agrega una tira del alga a tus brotes cuando los remojas, para permitirles absorber los minerales.
Al conseguir o comprar alga de mar, elige marcas orgánicas certificadas siempre que sea posible. Las algas de mar absorberán las propiedades del agua en que han crecido, así que debes asegurarte de que han sido criadas y cosechadas en aguas no contaminadas, que sean puras y estén libres de químicos dañinos.