Madre naturaleza. Piensa en ella como un medicamento natural ansiolítico y antidepresivo. Cuando vives en un área urbana o tienes un trabajo de oficina puertas adentro, eres muy proclive a sufrir una falta de naturaleza, que técnicamente se denomina “Desorden de Déficit de Naturaleza”. Diversos estudios, de hecho, han demostrado que la gente que comienza a ejercitarse al aire libre en un ambiente natural se agita menos y le resulta más fácil concentrarse. Los profesionales de la salud creen que el ejercicio en general es igual de beneficioso para quienes sufren depresión, con estudios que sugieren que más del 90% de los pacientes depresivos no necesitarían terapia si simplemente hicieran actividad física con regularidad.
Así que imagina combinar el ejercicio con los poderosos efectos de volver a estar en contacto con la naturaleza: es un poderoso combo anti-estrés. Hemos recolectado 12 formas divertidas y fáciles para desestresarte al aire libre. Te garantizamos que funciona, así que pruébalas tú misma.
- Camina
El ejercicio libera el estrés y te levanta, liberando endorfinas que mejoran el humor. Acompaña eso con la vitamina D del sol, aire fresco en tus pulmones, como así también el paisaje verde o la bella y calmante cercanía del océano, y siente cómo tu estrés se va lejos.
- Siéntate afuera y escucha música
Las investigaciones han demostrado que tu humor puede verse afectado fuertemente por la música que escuchas. Escuchar música fuerte y rápida te alegra y distrae de pensamientos negativos. Relájate con algunos de tus temas favoritos a la vez que obtienes un poco de vitamina D y aire fresco, como un suave mejorador del humor.
- Lleva a tu perro al parque
Él es realmente tu mejor amigo. Y afecta no solo tu humor, sino también tu presión arterial, que disminuye cuando acaricias a un perro. Dale a tu cachorro algo de amor llevándolo al parque o a la playa. Será terapéutico para ambos.
- Medita en el pasto
Puede sonar intimidante hacer esto, pero las investigaciones muestran que la conciencia es una habilidad cada vez más importante para nuestra salud, y las personas que meditan (incluso por 5 minutos al día) reciben beneficios asombrosos. Intenta descargar algunas meditaciones guiadas gratuitas o escucha algo en YouTube para comenzar.
- Lee un buen libro bajo un árbol
Prevén los pensamientos negativos y el pensar obsesivamente proveyéndote de una distracción. Incluso si no te gusta leer, puedes escuchar audiolibros para llevar a tu mente hacia otro mundo.
- Haz una comida al aire libre
Disfruta el desayuno en el jardín o el balcón, o lleva tu almuerzo afuera si estás en el trabajo. Alejarte de las distracciones y disfrutar tu comida en ambientes naturales, ayuda a calmar la mente.
- Toma una clase de yoga al aire libre
El yoga es un reductor probado del estrés, pero las posiciones invertidas hacia atrás o de cabeza pueden ser incluso más poderosas. Los estudios sugieren que la parte del sistema nervioso que te relaja podría estimularse curvando la espalda. Sin importar cuáles sean tus habilidades como yogui, disfrutar algunos estiramientos profundos y posiciones calmantes de yoga en cualquier momento del día es beneficioso para tu cuerpo y mente.
- Baila afuera
Invita algunos amigos, coloca algo de música y ten una fiesta en el jardín. Bailar es un maravilloso reductor del estrés. Ayuda a revitalizar tu energía, aumenta tu confianza, renueva tu creatividad e incluso refuerza tu sistema inmune, reduce la ansiedad e incrementa tus niveles de serotonina.
- Planta un jardín
Agregar pasto y flores a tus espacios no solo los hace verse lindos y hogareños; hacer jardinería te saca fuera de casa, lejos de distracciones y cerca de la naturaleza. Simplemente estar afuera puede mejorar tu humor drásticamente, pero además, ver tu pequeña huerta crecer o ver brotar una flor que plantaste, te da un sentido de cumplimiento y orgullo. ¿Servir una ensalada fresca de tu jardín? ¡No tiene precio!
- Da un paseo. Literalmente.
Dirígete a tu parque local o la montaña escalable más cercana y disfruta de las vistas pintorescas mientras mueves tu cuerpo. Harás que tu adrenalina suba, contemplarás algunas vistas increíbles, te desafiarás a ti misma y sentirás una maravillosa sensación de éxito al final.
- Lleva a tus hijos al parque
Pero no solo los mires: juega con ellos. Redescubre ese ambiente divertido y despreocupado de la infancia columpiándote en los columpios, persiguiendo a tus hijos sobre la arena, deslizándote por el tobogán y jugando juegos imaginarios. No solo es maravilloso para tu salud: tus hijos lo amarán también.
- Ve a andar en bicicleta
Andar en bicicleta no es solo un ejercicio increíble, también es divertido. Si no te has subido a una bicicleta en años, solo intenta otra vez. Siente la brisa en tu rostro, la adrenalina a través de tu cuerpo, y las endorfinas aumentando a medida que pedaleas alrededor de tu área local. Hay un sentimiento de libertad al andar en bicicleta que nos recuerda las vacaciones de verano de la infancia y los buenos tiempos.
La ciencia continúa probando los poderosos beneficios de la naturaleza. Cómo calma el cerebro, mejora el humor y la concentración. Incluso los pacientes hospitalarios se recuperan más rápido cuando pueden ver árboles o flores desde su ventana. Así que disfruta volver a la naturaleza, de la manera que prefieras. Garantizamos que no te arrepentirás.