No siempre tienes que seguir una infinidad de reglas para verte y sentirte bien. Sólo haz una cosa simple: Presta atención a cómo se siente tu cuerpo. Todos tenemos necesidades diferentes y cambian con el paso del tiempo. No existe un método único cuando se trata de una dieta óptima.
Existen unas cuantas prácticas benéficas universales que, cuando las haces con regularidad, te hacen sentir más joven y más vibrante. Que tu objetivo, sea agregar uno de los siguientes elementos a tu vida, unas cuantas veces al mes. Sea lo que hagas, no te abrumas y no te desesperes por hacerlo lento, de forma gradual. Incluso si solo adoptas una de estas sugerencias, tu cuerpo y salud se beneficiarán en un año.
- Come ajo: El componente activo benéfico en el ajo, es la alicina, que es maravillosa para cualquiera que trate de curar su intestino. Ralla de uno a 3 dientes, deja reposar por 10 minutos y luego cómelo, como un suplemento. Haz esto de 3 a 5 noches por semana antes de dormir.
- Sé buena con tu sistema linfático: Nuestro sistema linfático es una gran parte de la inmunidad de nuestro cuerpo, deshaciéndose de muchas toxinas que nosotros ingerimos. Algunas maneras de ser bueno con tu sistema linfático, es brincar en un trampolín, rebotar en un mini trampolin o cepillar tu piel seca.
- Modérate con la soya: El alto consumo de soya, ha sido ligado a cáncer de mama, aumento de peso y un desbalance hormonal. Si comes soya, opta por la fermentada, en pequeñas cantidades.
- Prepara tu propia comida lo más posible: Si cocinas en casa, te aseguras de usar los mejores y más frescos ingredientes.
- Ingiere un poco de limón cada día: Exprime un limón orgánico en tu comida o en un poco de agua, dos veces al día. Los beneficios son muchos.
- Compra comida orgánica cuando puedas: Los pesticidas que son rociados en la comida, o los fertilizantes usados, no te están haciendo (o al medio ambiente), ningún favor.
- Instala un filtro de agua casero. O al menos, coloca un filtro de agua en tu regadera o en el grifo de la bañera. Muchos sistemas de agua están llenos de toxinas.
- Vuélvete verde en tu cocina. Recuerda, lo que sea que entra en tu cuerpo, va al cuerpo. Si no te sientes segura al consumir algo, entonces no lo pongas dentro de tu cuerpo.
Asegúrate de consultar a tu doctor antes de hacer algún cambio en tu dieta.
