La mayoría de nosotros hemos sufrido lo suficiente en los dentistas como para no volver a descuidar nuestra dentadura, pero algunos de los tratamientos que utilizamos son muy agresivos y pueden tener consecuencias en nuestros dientes, como hipersensibilidad y caída del esmalte.
Es por eso que nos dimos a la tarea de investigar los métodos más efectivos para poder blanquear tus dientes sin todas esas sustancias tóxicas y químicos que sólo deterioran nuestro cuerpo.
- Bebe con un pajilla cuando sea posible
Cuando bebes directamente del vaso, taza o copa, el líquido que ingieres primero pasa por tu dentadura, inevitablemente. Bebidas como el vino o el té suelen provocar manchas en los dientes, por lo que una idea genial es beber siempre que se pueda con pajilla. Sé que parece complicado pues en ocasiones luce un poco tonto, pero de esta forma evitarás que la bebida toque tus dientes y pase directamente a la parte trasera de tu boca, y si algo se llegara a manchar en tus dientes, será la parte trasera que nadie ve.
- ¡Come frutas!
Aunque mucho ácido puede consumir tu esmalte, puedes usar fresas, limón rallado y cáscaras de naranja como un blanqueador natural de dientes.
Las fresas están llenas de ácido málico, una enzima natural que actúa como un astringente y ayuda a remover la decoloración de tus dientes. La fibra en estas bayas también ayuda a remover las bacterias que causan caries de tu boca. Los limones tienen un alto contenido ácido que funciona como removedor de manchas superficiales, mientras que la parte interna de la cáscara de la naranja contiene vitamina C, pectina, limoneno, glucarato y fibras solubles, todos ellos actúan como blanqueadores naturales.
Puedes untar cáscaras de naranja y limón sobre tus dientes, o triturar las tres frutas en una pasta y dejarla reposar en tus dientes por algunos minutos.
- Utiliza aceite de coco para enjuagarte
El aceite de coco ayudará principalmente a que tus encías estén más sanas, pues son bien sabidos sus beneficios desinflamantes. Pero además de eso, te apoyará como blanqueador, además de fortalecer el sistema inmune en tu cuerpo y, de este modo, matarás más de un pájaro de un solo tiro.
- Cepíllate con bicarbonato
Algo tan sencillo y barato se convierte en una de las armas más poderosas para blanquear tus dientes. Compra pasta dental que contenga bicarbonato o agrega un poco de forma separada cuando te cepilles tus dientes, verás que los cambios los notarás pronto.
- Usa un poco de carbón a tu rutina de higiene bucal
Esto puede que suene bizarro, pero algunas personas en la India han estado usando carbón activado para blanquear y limpiar sus dientes por siglos. Es un poco complicado, pero vale la pena. Abre una cápsula, mézclala con un poco de agua, sumerge tu cepillo de dientes y cepíllate. ¡Fácil!